Un buyer persona es un arquetipo de nuestro consumidor ideal. Creado a partir de datos demográficos, motivaciones, análisis del comportamiento, etc. Se trata de definir de la forma más real posible a nuestro consumidor, para así entender mejor qué quiere o qué necesita.
En el content marketing hay que crear algo de valor que logre despertar el interés de la audiencia a la que nos dirigimos, pero para ello hay que realizar un previo estudio de producto y mercado. Es aquí donde debemos incluir a nuestro buyer persona.
Conocer que es lo que le gusta y necesita el segmento de población al que te diriges, permite tener una idea sobre qué podemos ofrecerles y que podría funcionar.
¿Por dónde empiezo a la hora de definir mi buyer persona?
Para definir a tu buyer persona tienes que tener muy claro a quién te quieres dirigir, y recolectar toda la información posible.
1. Identifica la información necesaria
Tu primer paso será recaudar toda la información necesaria para poder definirlo. Para ello deberás hacerte preguntas relacionadas con el comportamiento, trabajo, características personales, proceso de compra, etc. Tienes que tener en cuenta que todos los detalles importan, incluido sus preocupaciones, creencias, etc. A continuación tenéis algunos ejemplos:
- ¿Qué consume?
- ¿Dónde vive?
- ¿Cuál es su sexo?
- ¿Qué edad tiene?
- ¿En qué situación familiar se encuentra?
- ¿Por dónde se mueve?
- ¿Qué blogs/páginas consulta?
- ¿En qué trabaja?
- ¿Cuáles son sus intereses?
- ¿Cuáles su situación socioeconómica?
- ¿Cómo se comporta?
- ¿En qué horas consume?
- ¿Qué le puedes ofrecer?
- ¿Cómo interactúa con las marcas/empresas?
2. Elige el método de investigación
En segundo lugar debes determinar cómo vas a recoger toda esa información. La opción más sencilla es mediante entrevistas grupales o individuales, a clientes. Ya sean por teléfono, online, o personales.
Otra opción sería utilizar herramientas o la propia base de datos de los clientes de la empresa, para obtener información interesante.
3. Recoge, analiza y organiza la información
Una vez que tengas toda la información posible, será necesario analizarla y organizarla. Cuando lo tengas, solo tendrás que crear una representación detallada sobre cómo es esa persona. No se trata de una lista de características, sino de que desarrolles una historia explicando quién y cómo es ese buyer persona.
Recuerda que los clientes no piensan igual que tu. Por lo que debes evitar hacer suposiciones que no estén contrastadas con datos reales.
Una mala definición de tu buyer persona, puede derrumbar toda una estrategia de marketing.
Tus clientes no piensan igual que tú.
Ventajas de definir a tu buyer persona
Ya sabes que es un buyer persona y cómo hay que hacer para definirlo. A continuación entenderéis la importancia y las ventajas que puede ofrecer a tu estrategia de marketing.
Permite conocer mejor el contenido que se puede crear para tu público, cuál funcionará, qué tono utilizar, qué temas son de interés etc.
Permite saber por dónde se mueven nuestros usuarios, en qué horarios, en qué plataformas, qué lugares visitan, dónde podemos encontrarlo, etc.
Ayuda a conocer mejor el público al que te quieres dirigir. De esta forma podrás establecer mejor tus objetivos y estrategias de marketing, optimizando sus resultados.